Escríbeme...
Aquí hablo de libros y comparto mis cuentos. Para hablar un rato sin mover los labios
sábado, 11 de octubre de 2008
Pausa obligada
Estos días no he podido acercarme a la ventanica para volveros loc@s con mis ocurrencias típicas. La causa, ¡fui secuestrada! El cachirulo me encontró a mí y contra mi voluntad se me llevó a un zulo donde he permanecido hasta hace un rato. Finalmente, el síndrome de Estocolmo me venció y ahora he tomado las riendas de la organización mafiosa cachirula. Cuidadito conmigo, si te apunto en el hombre con mi dedo índice, quedarás abducido... ¡y si no quereis que os pille, ale, a cachirulear por ahí...!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
¡Pásalo genial, Hache!.
ResponderEliminarAhhh, por cierto, thedm.
fdc