domingo, 16 de mayo de 2010

Paseante dominical (en disléxico)

He llenado la cafetera de azúcar moreno y casi la he puesto al fuego. Me he dado cuenta de que algo iba mal cuando el saquete de café se ha derramado por el suelo de la cocina -y yo pensaba que era un brik de leche-. Unos días antes iba a endulzar el café recién hecho con cafe molido y anteayer embadurné mi tostada con mermelada y después con mantequilla,... No es la primera vez que mi dislexia toma protagonismo. He llegado a poner mi ropa interior limpia en el cajón de los paños de cocina, y viceversa; guardado zapatillas en el armario del baño y gel y papel higiénico en el zapatero y casi regué las plantas con coca-cola un día de partido (ahí fue despiste, la verdad) Un día en la nevera lo han pasado las patatas fritas de bolsa y los cubitos de hielo no estaban muy frescos en el armario. Dislexicadas tengo a patadas,... Así que, ¿cómo no voy a errar en lo demás?
¡Yo me maravillo de no meter la pata aún más! ;)
PD.: De izquierda y derecha, mejor no hablar

5 comentarios:

  1. Una vez aliñé una ensalada para 6 personas con aceite, sal y mistol. La tuve que tirar, pero en vez de a la basura, fué enterita al tambor de la lavadora. ¡¡Menudo sesaguisado!!!

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  2. Ja, ja,... En mis buenos tiempos echaba harina a la ensalada en vez de sal,...

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  3. yo confundí el champú fructis con la crema depiladora veet. ¿a quién se le ocurre hacerlos del mismo verde? afortunadamente me di cuenta por el olor y no me depilé la cabeza... pudo haber sido terrible...

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  4. aaahhh... qué identificada me he sentido!!!... aprobé por azar el carnet de conducir: mi profesor, que sabía de mis meteduras de pata, me indicaba con la mano hacia donde tenía que girar cuando el examinador decía izquierda o derecha...


    saluditos desde Jaca!
    ;)

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  5. Besicos, Ona, (mi profe de la autoescuela hizo algo parecido, ja, ja,...)

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