Aquí hablo de libros y comparto mis cuentos. Para hablar un rato sin mover los labios
martes, 13 de julio de 2010
No compren pan o quizá sí
Eso. Que no lo entiendo. O no lo quiero entender. Porque si miro con atención siempre hay un gato sin dueño, una tuerca que no encaja, una bala perdida, una magdalena más pequeña que las demás, un número equivocado, un día tonto, un cuchillo que no corta, un programa que nadie ve, un rollo de papel sin papel, un saludo sin respuesta, un beso que no se da y claro, una YO. Puedo lamentarme infinitamente de mi suerte pero, ¿acaso en la larga historia de la humanidad has visto lamentarse a un gato, a una tuerca, a una bala o a una magdalena? Pues eso.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
a una magdalena si, lloran
ResponderEliminar¿Lo has visto tú? ¿Eh? ¡No! (Parezco la defensora chunga de las magdalenas, ;)
ResponderEliminarYo tampoco he visto lamentarse a una magadalena... pero conozco una canción de 'trigo limpio' que habla de una magdalena y que puede hacer llorar.
ResponderEliminarTampoco he visto lamentarse a un gato, pero creo que uno estuvo triste y azul. Desconozco su evolución y si quedaron secuelas.