martes, 24 de mayo de 2011

Camisetas

Solo había dormido cuatro horas; el día iba a ser demasiado largo, demasiado triste. Pero a las 6h30 de la mañana he decidido que me pondría mi camiseta favorita. Amélie sobre fondo verde guiaría mis pasos. ¿Quién mejor?
Creo que algo así habrá pensado el chico con el que me he cruzado a las 6h55. Ha mirado mi camiseta y yo la suya. Después nos hemos buscado los ojos y hemos sonreído cómplices. También tenía ojeras y parecía casi tan abatido como yo pero... ¡él llevaba la S de Superman, amigos, y eso es una buena señal!, ¡Seguro que nada malo puede pasarme ya! 

¡Gracias, colega, nos vemos mañana!