Aquí hablo de libros y comparto mis cuentos. Para hablar un rato sin mover los labios
domingo, 21 de agosto de 2011
Paseante dominical (de este a oeste)
Mil kilómetros y los que hicieran falta. Por un/a amigo/a de verdad se puede hacer cualquier cosa. En mi caso, cruzar la península de punta a punta, ida y vuelta en 36 horas, ¡y volvería a repetir mañana! No importa el calor, la lluvia, el cansancio, las horas, la carretera,... ¡Un abrazo lo cura todo!
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
y pregonarlo a los cuatro vientos???
ResponderEliminar